Moción anual
Los científicos de los planetas y los astrónomos de los exoplanetas están remodelando nuestra comprensión del universo, presentando un cosmos fascinante lleno de lugares y destinos, no un vacío. Al mismo tiempo, los físicos y biólogos de la Tierra diseñan modelos de ecosistemas autosostenibles, como la Biosfera 2 y el Invernadero de Marte/Lunar, con el objetivo de diseñar minimundos bioregenerables que puedan funcionar por sí mismos. A medida que se desarrollan estas revoluciones científicas, con los espacios lejanos y los sistemas de vida globales como objetos de “trabajo de campo”, ¿qué es lo que cuenta como “entorno humano”? ¿Cómo nos relacionamos, como individuos y sociedades, con espacios, cosas y procesos que no experimentamos o no podemos experimentar directamente y que consideramos “extremos” o “más allá” de lo humano?
Desde que Ernst Haeckel (1866) definió la ecología como la ciencia de las interacciones entre los organismos vivos y sus entornos (una ciencia del oikos), los límites entre los sistemas vivos y los no vivos se han difuminado constantemente. La noción de homeostasis (Cannon, 1932) o los bucles de retroalimentación (Rosenblueth, Wiener y Bigelow, 1947) han llevado a considerar de forma muy similar los fenómenos relacionados tanto con la descripción de la vida como con la producción de artefactos. Estas nociones condujeron progresivamente a la aparición de la cibernética, una ciencia de las estructuras que describe la dinámica de los sistemas autoorganizados y participa simultáneamente en la concepción de un nuevo tipo de máquinas.
¿Qué crees que pasaría si pudieras viajar a la velocidad de la luz
“Si pudiéramos medir las ondas gravitacionales de una supernova, podríamos entender las distorsiones de la materia que se producen en el interior de la estrella; la luz nos dice lo que ha ocurrido desde el exterior de la estrella, por lo que aprendemos información complementaria.
“Esto es sólo el principio. Creo que las ondas gravitacionales van a revolucionar nuestra comprensión del Universo, vamos a descubrir objetos que no sabíamos que existían. Es un resultado importante en nuestra búsqueda para entender el Universo.
“Decidimos que, aunque seguiríamos luchando por un detector australiano, trabajaríamos con el proyecto estadounidense para aprender a hacer estas cosas, para formar parte de esa aventura, de modo que cuando se produjera la detección, Australia tuviera un papel”.
Como resultado, LIGO cuenta con componentes ópticos y cámaras de fabricación australiana y técnicas que miden las diminutas distorsiones del espacio, como parte de la tecnología de todo el mundo instalada en el proyecto de 500 millones de dólares.
“Si el mundo dice que necesitamos un detector en Australia para hacer la ciencia óptima, entonces esperamos poder reunir a un consorcio internacional, para que en algún momento del futuro, esa visión que tuvimos en 1992 pueda hacerse realidad”.
Propiocepción
El Sentido del Universo aborda la reflexión existencial y fenomenológica sobre la cosmología moderna con el objetivo de revelar los compromisos teológicos ocultos en la cosmología relacionados con el misterio de la existencia humana. El libro propone una nueva aproximación al diálogo entre ciencia y teología basada en un profundo análisis filosófico de las formas de actuación de la subjetividad implicadas en el estudio del mundo y en la experiencia religiosa. La singularidad de este libro es que utiliza los recientes avances de la filosofía fenomenológica y de la teología filosófica para acentuar el sentido existencial de la cosmología como discurso que explica en última instancia la condición humana.
El objetivo del libro no es hacer un análisis comparativo de la narrativa científica cosmológica y la de la Biblia, o la de los Padres de la Iglesia (en lo que se refiere a la estructura del universo), sino revelar la presencia de una dimensión teológica oculta en la cosmología que se origina en la capacidad que Dios ha dado a la humanidad para discernir y revelar el sentido de la creación. El libro contribuye a la síntesis de la apropiación e incorporación de las ideas filosóficas modernas en la teología cristiana, en particular en su forma ortodoxa oriental.
El universo de los sentidos online
debemos abandonar nuestra tendencia a conceptualizar las observaciones como cosas. Desde entonces, los experimentos han confirmado que -como predice la mecánica cuántica- la realidad es contextual, lo que contradice las formulaciones, al menos intuitivas, del realismo y corrobora la hipótesis de un universo mental. Sin embargo, para dar a esta hipótesis una interpretación coherente, hay que explicar cómo un universo mental puede -al menos en principio- dar cabida a (a) nuestra experiencia de nosotros mismos como mentes individuales distintas que comparten un mundo más allá del control de nuestra voluntad; y (b) el hecho empírico de que este mundo es contextual a pesar de ser aparentemente compartido. Combinando una formulación moderna de la ontología del idealismo con la interpretación relacional de la mecánica cuántica, el presente artículo intenta proporcionar un marco explicativo viable para ambos puntos. En el proceso de hacerlo, el artículo también aborda los principales reparos filosóficos de la interpretación relacional.
La conciencia y la interpretación de la mecánica cuántica en la filosofía de la ciencia cognitiva La existencia en la metafísica Interpretaciones de la mecánica cuántica, miscelánea en la filosofía de la ciencia física Ontología, miscelánea en la metafísica Interpretaciones relacionales en la filosofía de la ciencia física